Hoy es un gran día. La justicia argentina ha condenado a Jorge Videla, Reynaldo Bignone y otros altos cargos del Ejército por el robo sistemático de bebés durante la dictadura.
Sin embargo, todavía andan libres muchos cómplices de este horror. Se necesita mucha gente para secuestrar a embarazadas, esperar a que den a luz en centros de tortura asesinarlas y entregar a los bebés a familias afines al régimen. Médicos, jueces, miembros de la Iglesia Católica… todos ellos deberían ser juzgados.
Mientras llega ese día, todavia cantamos:
(Por cierto, ¿para cuándo un juicio similar en España?)
Como ha dicho el amigo Vergara:
http://www.eldiario.es/zonacritica/author/bernardo-vergara/
sobran las palabras.